Palabra tomada directamente del latín.
Mira que bien, hoy van a hablar de mi tía, la del pueblo. Craso error.
La facundia no es tu tía, la del pueblo; sino que con este término designamos a la elocuencia, locuacidad o facilidad de palabra; lo que llamamos la labia, vamos. Se requiere desparpajo, fluidez y desenvoltura en el habla pero sin pasarse, ya que sino caeríamos en la verbosidad o verborrea.
A la persona que posee tal cualidad se la denomina facunda; esta vez sí, como tu tía, la del pueblo.