Del latín uxor (esposa) y caedere (matar).
Consiste en el familicidio en que un hombre mata a su cónyugue mujer. Si fuera la mujer la que finiquita a su marido, hablaríamos de mariticidio. Si a quien se despacha es a los hijos; hablaríamos de filicidio. Si son los chavales los que se ejecutan entre ellos lo llamaríamos fraticidio.
Curiosamente, el término parricidio es aplicable tanto si el exterminado es el padre, la madre, el hijo o el cónyugue. En cambio, matricidio hace referencia únicamente a la madre.
Por último, si la familia masacrada en esta entrada pertenecieran a la realeza, hablaríamos de magnicidio.